¿Un poquito exagerado? El despido del médico en el IESS y el show mediático de Lama
Un análisis de la precipitada desvinculación del profesional de salud, el mal manejo del sistema y las políticas de Edgar Lama, presidente del IESS, que evidencian una gestión ineficaz y autoritaria.
Contextualización del incidente
El pasado 3 de octubre, el presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Édgar Lama, protagonizó un escándalo mediático que rápidamente se viralizó en redes sociales. Durante una inspección sorpresa en el Hospital General de Manta, Lama encontró que un médico no había entregado todos los medicamentos recetados a un paciente. El galeno justificó la omisión señalando que uno de los fármacos estaba agotado, pero Lama, tras revisar la bodega del hospital, constató que sí había existencias disponibles, aunque no estaban registradas en el sistema. Aquí radica el gran problema: la gestión de existencias en la bodega y el sistema informático.
Este incidente no es simplemente una cuestión administrativa o un error aislado, sino un reflejo de las políticas autoritarias de Lama y el uso de la figura del médico como chivo expiatorio para esconder las fallas estructurales en el IESS. ¿Realmente es esta una cuestión de negligencia del médico o un error estructural en el sistema de manejo de existencias? Aquí radica la gran incógnita. ¿Es justo despedir a un profesional de la salud por un error del sistema que no depende de él?
Los médicos no son responsables de la gestión informática ni de los errores del sistema. La administración de existencias en bodega y farmacia es una responsabilidad ajena a la labor médica. Por lo tanto, el despido apresurado y la condena pública sin una investigación previa son totalmente injustificables.
I. El escándalo mediático y la falta de presunción de inocencia
Lo primero que salta a la vista en este incidente es cómo el gobierno utiliza la figura del médico como un chivo expiatorio para encubrir las fallas crónicas del IESS. ¿Por qué actuar de esta manera, sin investigar adecuadamente lo ocurrido y sin seguir los pasos establecidos en un proceso disciplinario? La falta de un debido proceso y la presunción de inocencia en este caso refleja un exceso de autoridad y una gestión ineficaz que no resuelve los problemas reales del sistema.
Este tipo de decisiones no solo socavan la confianza en las instituciones públicas, sino que crean un ambiente de inseguridad laboral para los profesionales de la salud, quienes ya enfrentan condiciones difíciles en su trabajo. El despido sin previo aviso ni investigación adecuada no hace más que perjudicar al sistema, que sigue careciendo de los recursos necesarios para funcionar de manera eficiente.
II. El “show” mediático y la falta de duele proceso
Es evidente que la decisión de Lama no tiene como objetivo principal resolver un problema administrativo, sino hacer un show mediático. En lugar de actuar de forma profesional y corregir los problemas estructurales del IESS, Lama ha optado por una medida punitiva que más parece una exhibición de poder que un intento de solucionar los errores reales. Esto es aún más evidente cuando se considera que la gestión deficiente del sistema informático y la mala administración de las existencias no son responsabilidad del médico en cuestión.
El despido apresurado y la falta de un proceso justo reflejan una falta de profesionalismo por parte de Lama, quien debería centrarse en mejorar los procesos administrativos, en lugar de recurrir a medidas punitivas que solo generan más caos e inestabilidad.
III. El desprecio hacia los profesionales de la salud
Edgar Lama ha mostrado una actitud despectiva hacia los médicos, y esto no es algo nuevo. Durante su gestión como Ministro de Salud, ya se le había acusado de tratar a los profesionales con prepotencia y desdén. En este caso, el trato hacia el galeno despedido es solo una continuación de esta falta de respeto hacia los médicos.
A pesar de que su abuelo y su padre fueron médicos, Lama parece estar más influenciado por su frustración personal que por un verdadero interés en mejorar el sistema de salud. Este desprecio hacia la profesión médica es evidente en la forma en que trata a los profesionales, convirtiéndolos en chivos expiatorios de una gestión que claramente ha fracasado.
IV. El problema real del IESS: mala gestión crónica
El verdadero problema del IESS no radica en un error administrativo aislado, sino en una mala gestión crónica que afecta a la institución desde hace años. La falta de recursos, la escasez de medicamentos y el desorden administrativo son problemas estructurales que persisten a lo largo de la administración de Lama. Sin embargo, en lugar de abordar estas deficiencias, el gobierno ha optado por culpar a los médicos y otros empleados, desvirtuando la verdadera causa del colapso del sistema.
Si el gobierno realmente quiere resolver los problemas del IESS, debe reformar la gestión administrativa, mejorar la infraestructura y garantizar que los recursos sean distribuidos de manera eficiente. Cualquier intento de culpar a los profesionales de la salud solo desvía la atención de los problemas reales y perpetúa la crisis.
V. ¿Es este un tema político?
Lo que realmente sorprende en este caso es cómo algunos sectores, en tono irónico, justifican el despido del médico. Según su lógica, muchos médicos apoyaron a figuras de la derecha, como Lama y Noboa (Federación Médica Ecuatoriana), y por lo tanto, “se lo merecen”. Pero, claro, culpar a los profesionales de la salud por un problema que es estrictamente administrativo no es solo injusto, sino incoherente.
¿Por qué los médicos deberían ser responsables por las decisiones políticas que toman otros? Si un sector de médicos apoyó a la derecha, ¿no es justo que ahora se diga que deben experimentar, como castigo, las consecuencias de ese apoyo? La ironía está en que, al votar por los mismos que hoy los despiden, terminan siendo las víctimas de su propia elección. Pero no se debe confundir esto con justicia. Se trata de una injusticia palpable que pone en evidencia los verdaderos problemas dentro del IESS.
Por supuesto, no hay razón alguna para justificar el despido de un médico para hacerle sentir en carne propia su supuesta equivocación política. El debido proceso y la justicia laboral deben prevalecer, independientemente de las simpatías políticas. El despido de este médico refleja la incapacidad del sistema para enfrentar los problemas estructurales que afectan a todos los involucrados.
VI. Implicaciones a largo plazo para el sistema de salud
Este despido no es un incidente aislado, sino un reflejo de una crisis estructural que afecta profundamente al IESS y a la salud pública en Ecuador. Si el gobierno sigue por el camino de culpar a los profesionales de la salud por los problemas internos del sistema, nunca se alcanzará una solución real. La gestión deficiente, el desorden administrativo y la falta de recursos seguirán siendo los verdaderos problemas, y el círculo vicioso de despidos y sanciones no hará más que desmotivar a los trabajadores y perjudicar aún más a los pacientes.
Es urgente que el gobierno cambie su enfoque. En lugar de buscar chivos expiatorios, debe centrarse en implementar reformas profundas en el sistema de salud. Solo así se podrá garantizar una atención médica de calidad y una administración eficiente que beneficie a la ciudadanía, en lugar de generar conflictos innecesarios entre médicos, pacientes y funcionarios del gobierno.
Conclusión final
El despido del médico en Manta es solo un ejemplo de cómo la mala gestión del IESS y las decisiones precipitadas de Edgar Lama continúan afectando a los profesionales de la salud. La falta de un proceso justo, la escasa investigación de los hechos y la falta de rendición de cuentas en torno a los problemas reales del IESS subrayan la necesidad de un cambio urgente en la forma en que se administra el sistema de salud en Ecuador.
El gobierno debe dejar de culpar a los médicos y empezar a asumir su responsabilidad en la crisis del sistema de salud. Solo con reformas estructurales reales y un enfoque más humanitario y profesional en la gestión del IESS se podrá garantizar un futuro mejor para los pacientes y los profesionales de la salud.
Bibliografía:
El Comercio, Noticias IESS.
Revista Vistazo, Análisis de la gestión de Edgar Lama en el IESS.
La Hora, Opiniones sobre el despido del médico del IESS.
Firmado por:
Dr. Ney Briones Zambrano
Director Ejecutivo Movimiento Pluricultural Quinta Región
Redactor Red Conecta Ecuador Noticias / Substack