La alga que arruina nuestras costas: turismo en jaque por una especie invasora
Rugulopteryx okamurae y la amenaza marrón en el turismo y la biodiversidad
Por Dr Ney Briones Zambrano, Médico. ,y articulista ambiental y de actualidad
Contextualización
En los últimos veranos, una presencia cada vez más inquietante se ha apoderado de las playas del sur de España. No se trata de un animal marino peligroso ni de una subida repentina del nivel del mar. Se trata de un alga invasora con nombre japonés: Rugulopteryx okamurae. Este organismo, aparentemente inofensivo, ha transformado tramos enteros del litoral mediterráneo y del Estrecho de Gibraltar en espacios marcados por montones oscuros, malolientes y antiestéticos.
Playas antes abarrotadas de turistas ahora presentan un aspecto desolador. El alga, que prolifera sin control, ha impactado no solo en la biodiversidad marina, sino también en el corazón mismo de la economía costera: el turismo. Ceuta, Murcia, Valencia y especialmente el litoral andaluz han sido las regiones más afectadas.
Este artículo pretende analizar, desde diferentes perspectivas, cómo una "mariña marrón" está transformando nuestra relación con el mar, el modelo económico de las regiones costeras y los desafíos ambientales que nos plantea el cambio global.
I. Origen de la invasora: del Pacífico a la costa ibérica
La Rugulopteryx okamurae es originaria del Pacífico occidental, según estudios publicados por la Universidad de Cádiz (UCA) y recogidos en la Revista de Ciencias Marinas (Fernández et al., 2022), específicamente de las costas japonesas. Se presume que llegó a España a través de aguas de lastre de buques o adherida a cultivos de acuicultura importados. La primera detección importante ocurrió en el Parque Natural del Estrecho, en 2015, según estudios de la Universidad de Cádiz (UCA).
Desde entonces, la expansión ha sido imparable. Esta especie encuentra en nuestras aguas temperaturas ideales, pocos depredadores y un entorno perfecto para colonizar rápidamente. Hoy, sus restos se acumulan por toneladas en las playas, formando verdaderas alfombras marrones.
II. Un enemigo del ecosistema local
A diferencia de algas autóctonas, la Rugulopteryx okamurae desplaza a otras especies marinas, incluidas praderas de posidonia y comunidades de algas autóctonas que sirven de refugio y alimento para diversas especies. Su presencia altera la cadena trófica y afecta negativamente a la biodiversidad costera (Fernández et al., 2022).
Además, la descomposición masiva de esta alga en la orilla libera gases como el ácido sulfhídrico, responsables del mal olor, y puede generar compuestos tóxicos en altas concentraciones, según el MITECO. Esto convierte a los espacios naturales costeros en escenarios contaminados, cuando deberían ser refugios de vida y de recreación humana.
III. La playa vacía: impacto económico y turístico
La industria turística costera representa hasta un 15% del PIB en algunas provincias del litoral andaluz, según el Instituto Nacional de Estadística (INE, 2023) y el Observatorio Turístico de Andalucía. Hoteles, chiringuitos, actividades náuticas y el comercio local dependen en gran medida de la buena salud de las playas.
En zonas como Tarifa, Algeciras o Bolonia, la presencia del alga ha llevado a cancelaciones de reservas, quejas en redes sociales y una pérdida de competitividad frente a otros destinos mediterráneos. Los ayuntamientos deben invertir miles de euros en limpiar las playas a diario, en una batalla casi perdida.
IV. El dilema de la gestión: entre la ciencia y el abandono
Uno de los mayores problemas ha sido la falta de una estrategia coordinada y nacional. Las competencias costeras están repartidas entre administraciones locales, autonómicas y nacionales, lo que complica la toma de decisiones efectivas.
Los investigadores piden más fondos para estudiar el comportamiento biológico del alga y encontrar formas sostenibles de controlarla. Algunas propuestas incluyen el aprovechamiento de la biomasa para compostaje, fabricación de bioplásticos o incluso generación de biogás. Sin embargo, estos procesos son aún costosos y están en fases piloto.
V. Turismo vs. sostenibilidad: un modelo en crisis
El caso de la Rugulopteryx okamurae pone en evidencia la fragilidad del modelo turístico actual. Un sistema que depende excesivamente de factores climáticos y paisajísticos está expuesto a la mínima alteración ambiental.
Es el momento de replantear el turismo de sol y playa como única estrategia. La diversificación de la oferta, la inversión en turismo ecológico o cultural y el desarrollo de una economía circular en la costa podrían convertir esta crisis en una oportunidad de transición hacia un modelo más resiliente.
VI. La responsabilidad colectiva: ciudadanía, ciencia y política
Combatir esta plaga no es solo cuestión de ciencia ni de competencias administrativas. Es un problema que requiere el compromiso de toda la sociedad. Las campañas de sensibilización, el respeto por la biodiversidad y la presión ciudadana para exigir planes eficaces son fundamentales.
La Rugulopteryx okamurae nos recuerda que la naturaleza no entiende de fronteras ni de temporadas turísticas. La lucha por mantener nuestras costas vivas y sostenibles comienza con información, conciencia y acción colectiva.
Conclusión
Las "mariñas marrones" que hoy se acumulan en nuestras playas son solo el símbolo visible de un conflicto más profundo entre naturaleza, economía y cultura. Mientras los turistas se alejan y los ecosistemas se resienten, nuestras decisiones como sociedad definirán si permitimos que este sea solo el principio del deterioro costero o una oportunidad para repensar nuestra relación con el mar.
Bibliografía
Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) – Informes sobre especies invasoras.
Fernández, L. et al. (2022). "Impacto ecológico de Rugulopteryx okamurae en el Estrecho de Gibraltar". Revista de Ciencias Marinas.
Universidad de Cádiz (UCA) – Proyecto europeo sobre especies exóticas marinas (2023).
Instituto Nacional de Estadística (INE) – Datos económicos por provincias.
Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía – Campañas de vigilancia costera.
The Guardian (2025). Spanish beaches swamped by invasive Japanese seaweed.
Diario de Cádiz, La Vanguardia, RTVE.es – Reportajes de actualidad 2024-2025.